El día 19 de abril me dirigía a Barcelona en coche, para presenciar las exposiciones de las tesinas del Master de Terapia Neural, cuando me vi atrapado a la altura del meridiano de Greenwich (41º 31´N 0º 00´W), por una entrevista que le hacían a José Luis Cordeiro en Radio Nacional; el tema expuesto era bien simple: el envejecimiento es una enfermedad de la que son tributarias otras muchas (Cáncer, diabetes, Alzheimer,…) y que, llegados a este punto de avance científico, está a punto de ser tratada y si es posible curada.
Para los que ya estamos metidos en un cambio de paradigma como representa la Terapia Neural, este nuevo punto de vista sobre la enfermedad, la salud, la vida y la muerte, me resulto fascinante. La entrevista presentaba a un hombre entusiasmado con su trabajo que había catalizado en la escritura de un libro presentado en España esa misma tarde en Barcelona, a escasos 50 metros del lugar al que yo me dirigía. Llamé y aunque el aforo del local estaba completo, una anulación de última hora me permitió asistir a la presentación de “La muerte de la muerte”, de José Luis Cordeiro y David Wood.
Con un lenguaje sencillo pero cargados de evidencias científicas, ambos autores repasaron los antecedentes históricos de la comprensión y aceptación por parte de la humanidad, de la enfermedad y la muerte como algo inevitable (hasta ahora?), la búsqueda de la eterna juventud y los esfuerzos realizados hasta ahora para detener la obsolescencia programada por nuestro ADN. El libro repasa los actuales desarrollos experimentales puestos en marcha, el coste económico, los problemas demográficos, éticos y logísticos de un proyecto de tal envergadura.
Conseguir la longevidad indefinida, como prefieren llamar los autores,requere la unión de fuerzas conjuntas, dinero e inteligencia, como la que el hombre ha logrado en otros momentos de la historia (abolición de la esclavitud, proyecto Apolo y llegada del hombre a la Luna, energía atómica, proyecto CERN, proyecto genoma humano,…).
Ponen una fecha posible, 2029 para la consecución de lo que denominan “velocidad de escape de la longevidad”, en la que se iguala el tiempo tiempo transcurrido al tiempo que se añade a la esperanza de vida (en la actualidad se añaden 3 meses de esperanza de vida por cada año que transcurre) y otra fecha, 2045, cuando la Inteligencia Artificial, superará a la mente humana, ayudándonos a mejorar nuestras capacidades y a resolver los problemas que todavía no somos capaces de enfrentar.
Quiso la casualidad que en las tesinas del Master de Terapia Neural se hiciera referencia a las infusiones de procaína intravenosa de la doctora Ana Aslan, controvertida pionera en la prevención del envejecimiento, con lo que resonaba la conferencia en mis oídos mientras atendía a los efectos de la procaína. El mismo envejecimiento que reconoce el libro como la primera causa de muerte en estos momentos (cada día fallecen 100.000 personas a causa de enfermedades asociadas al envejecimiento).
Es un libro provocador e interesante que abre un intenso debate sobre lo que está al caer en medicina y en nuestras vidas y que no podemos eludir. Si el año pasado consideré “Homo Deus” y “Homo Sapiens” de Yuval Noah Harari mis libros imprescindibles de 2017, este año mis votos van para “La muerte de la Muerte”.
José Luis Cordeiro, venezolano, charlatán y psuedocientífico para algunos, estudió en el Massachusetts Institute of Technology (MIT), donde obtuvo su licenciatura en ingeniería mecánica. Más adelante realizó estudios de Economía Internacional y Política comparada en la universidad de Georgetown, y luego completo su master en Administración de Empresas (MBA) en el Institut Europeén d´Administration des Affaires (INSEAD) en Fontainebleau, Francia. Según sus detractores, su curriculum de Linkedin está tan inflado como el de los políticos españoles pero escucharle resulta apasionante y disruptivo.
David Wood, británico, recibió un triple grado de matemáticas de Cambridge, Reino Unido. También en Cambridge y realizó cuatro años de investigación doctoral en la filosofía de la ciencia. Es uno de los pioneros de la industria de los teléfonos inteligentes, cofundó Symbian, el creador del primer sistema operativo para teléfonos inteligentes con éxito en el mundo, y formó parte de los equipos de liderazgo de Psion Software y Symbian desde 1996 hasta 2009.
De 2010 a 2013, David fue Director de Planificación Tecnológica (CTO) de Accenture Mobility, liderando el equipo global que identificó y supervisó las inversiones por etapas para crear activos utilizando tecnologías móviles emergentes o en rápido cambio. También codirigió la iniciativa empresarial “Mobility Health” de Accenture, “Innovación de la movilidad para una asistencia sanitaria espectacularmente mejor”. Ahora actúa como futurista independiente, consultor y escritor en Delta Wisdom.
En noviembre de 2005, David recibió un Doctorado honoris causa en Ciencias (D.Sc.) de la Universidad de Westminster, en reconocimiento a sus servicios a la industria de los teléfonos inteligentes. La revista T3 lo incluyó en 2009 en su lista de las “100 personas más influyentes en tecnología”.